Más de 100 obras creadas como repudio a la dictadura militar de Augusto Pinochet (1973-1990) se exponen desde ayer en el Museo de la Solidaridad Salvador Allende de la capital chilena, muestra que se extenderá hasta el 1 de septiembre próximo.
Según los organizadores, como este año se cumplen 40 años del golpe militar que culminó con el suicidio del presidente Salvador Allende y el bombardeo del Palacio de La Moneda, se ha creado un proyecto concebido como una conmemoración, pero a la vez como una colaboración para restaurar simbólicamente las heridas provocadas por el quiebre democrático y la represión.
En este sentido, se recuerda la prisión, la muerte, la tortura, el exilio, la persecución y violación de los derechos humanos de miles de chilenos y chilenas sufridas tras el golpe militar.
"Se ha denominado Cartografía de la Resistencia", en alusión a la capacidad de las personas para sobreponerse a los dolores y los traumas, y consta de cuatro exposiciones.
La que se inauguró ayer es la segunda, y se ha denominado Imaginarios de la Resistencia", señaló a Efe Maritza de Martini, encargada de prensa del Museo. De Martini explicó que la muestra alude a que las heridas provocadas por la dictadura salen del ámbito institucional y se trasladan al cuerpo.
"Al cuerpo humano víctima de la violencia; al cuerpo abstracto del Estado y sus instituciones, al victimario, convertido en "bestia"; a los poderes de todo tipo que colaboran con la dictadura; a los que resisten el apremio por diversas vías", enfatizó.
La encargada de prensa recordó que cada uno de estos conceptos está plasmado en otro cuerpo, "un cuerpo de más de 100 obras que fueron donadas al Museo de la Solidaridad Salvador Allende como un llamado de atención, una denuncia de lo que ocurría en Chile".
Señaló que son trabajos de reconocidos artistas de todo el mundo que donaron en su oportunidad al presidente Salvador Allende con los que comenzó a montar un museo, museo que dejó de existir tras el golpe militar del 11 de septiembre de 1973, cuyas obras fueron robadas por los militares, pero que a partir de 1975 se rearmó (el museo) en diferentes países bajo el nombre de Museo de la Resistencia.
"Su propósito es mantener el Museo de la Solidaridad y a la vez mostrar su repudio a la dictadura", dijo la comunicadora
Según los organizadores, como este año se cumplen 40 años del golpe militar que culminó con el suicidio del presidente Salvador Allende y el bombardeo del Palacio de La Moneda, se ha creado un proyecto concebido como una conmemoración, pero a la vez como una colaboración para restaurar simbólicamente las heridas provocadas por el quiebre democrático y la represión.
En este sentido, se recuerda la prisión, la muerte, la tortura, el exilio, la persecución y violación de los derechos humanos de miles de chilenos y chilenas sufridas tras el golpe militar.
"Se ha denominado Cartografía de la Resistencia", en alusión a la capacidad de las personas para sobreponerse a los dolores y los traumas, y consta de cuatro exposiciones.
La que se inauguró ayer es la segunda, y se ha denominado Imaginarios de la Resistencia", señaló a Efe Maritza de Martini, encargada de prensa del Museo. De Martini explicó que la muestra alude a que las heridas provocadas por la dictadura salen del ámbito institucional y se trasladan al cuerpo.
"Al cuerpo humano víctima de la violencia; al cuerpo abstracto del Estado y sus instituciones, al victimario, convertido en "bestia"; a los poderes de todo tipo que colaboran con la dictadura; a los que resisten el apremio por diversas vías", enfatizó.
La encargada de prensa recordó que cada uno de estos conceptos está plasmado en otro cuerpo, "un cuerpo de más de 100 obras que fueron donadas al Museo de la Solidaridad Salvador Allende como un llamado de atención, una denuncia de lo que ocurría en Chile".
Señaló que son trabajos de reconocidos artistas de todo el mundo que donaron en su oportunidad al presidente Salvador Allende con los que comenzó a montar un museo, museo que dejó de existir tras el golpe militar del 11 de septiembre de 1973, cuyas obras fueron robadas por los militares, pero que a partir de 1975 se rearmó (el museo) en diferentes países bajo el nombre de Museo de la Resistencia.
"Su propósito es mantener el Museo de la Solidaridad y a la vez mostrar su repudio a la dictadura", dijo la comunicadora
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